Complace que Eduardo Pizarro en Cambiar el Futuro. Historia de los procesos de paz en Colombia (1981-2015) (Debate, Penguin Random House, Bogotá, 2017), exponga las gestiones presidenciales recientes comenzando por Julio César Turbay y finalizando con Juan Manuel Santos; el turno le corresponde a Ernesto Samper, en 1994-1998, con quien se mantuvo excelente relación epistolar, inclusive verbal, cuando hubo ocasión.
CON una odiosa regularidad, desde el 8 de mayo de 1997, han venido apareciendo unos escritos semanales en este diario lo que bien puede significar que los lectores, si los hay, han tenido la paciencia de leer en estos veinte años ya vencidos, las reacciones sobre hechos y actividades nacionales e internacionales que le merecieron atención para quedar recogidas en algo así, como dos cientos cincuenta artículos, si así pueden llamarse las colaboraciones que me he permitido escribir, gracias a la amable invita
Llegó la Navidad. La siento llegando muy temprano, como si el tiempo, este año, hubiera corrido con más prisa; como si los 365 días en vez de discurrir en una fila ordenada uno tras otro, se hubieran rodado por un tobogán y en medio de la carrera se hubieran perdido algunos, muchos...
Con secreta mermelada que camuflaron como fondo congresional en la aplazada reforma tributaria y un pupitreo acelerado, vertiginosamente pasó la ley de financiamiento -la finacio y miento-. Un Senado soñoliento con David Barguil como ministro ad-hoc, y en la mañana siguiente una cámara apenas desperezándose, Colombia recibió un 19 de diciembre con el más confuso remedo tributario de su historia. Retardatario como los de siempre.
Es un pasatiempo ancestral, que los muiscas se ingeniaron desde tiempo inmemorial. En familia lo jugaron y de herencia nos dejaron.
Miguel Ángel Gómez
Termina el período legislativo del segundo semestre del 2018 con el modelo que adoptó el presidente Duque en el sentido de que los partidos políticos no tienen representación formal en el gobierno. Ese ha sido, sin duda, un ensayo audaz que busca replantear las relaciones del Ejecutivo con el Congreso para garantizar su independencia.
“¿Hasta cuándo creyó usted que el Niño Dios traía los regalos de Navidad?”, preguntó un reportero a Belisario Betancur cuando, a inicios de diciembre de 1981, era candidato presidencial, y estaba en su casa organizando el pesebre. Contestó: “¿cómo que hasta cuándo?, pues yo sigo creyendo que es Él quien nos lo da todo”.
Hace muchos años, cuando su reino era aún de este mundo, a George le agarró una Navidad en la Tierra Santa, bendito sea El Señor. Con Mandarina había levantado el arbolito, al lado de un hermoso pesebre de pino que había traído el señor embajador de Nazaret, pero no fue cosa nada fácil.
LOS proyectos debatidos en acalorados debates en el Congreso muestran muchas veces efectos contrarios a lo que se necesita porque se discuten con furia y agresividad para imponerlos.
El profesor Alvin Toffler publicó La Tercera Ola, en 1980, un libro con cierto aire futurista sobre el cómo sería la sociedad del siglo XXI, la superación de las ideologías junto con sus diferentes formas de gobierno, el auge de las nuevas tecnologías junto con lo que se conoce como la era de la información.