Mario Vargas Llosa, en escrito publicado en El País, analiza el libro de María Elvira Roca Barea, Hipertrofia y Leyenda Negra.
Uno. La conmemoración de los doscientos años de la Batalla de Boyacá, acontecimiento fundacional de la Nación, debe servir para que el país mire su pasado sin complacencia, pero también sin la mirada lastimera y quejosa con la que suele contemplarse en el espejo de su historia. Estos años han sido años de construcción de país, y con todas las dificultades y las equivocaciones, los desvaríos y las frustraciones, no han transcurrido en vano.
Los seres humanos corremos el altísimo riesgo de morir con el ego virgen, inexplorado, ignorado. Pero resulta que el ego es una parte muy importante de esta experiencia que llamamos vida, pues es el guardián de la personalidad, aquella que necesitamos para diferenciarnos de los demás y a partir de la cual logramos construirnos emocionalmente un lugar en el mundo. Hemos escuchado hablar tantas veces del ego y desde tan diversas posturas, que podemos confundirnos y no saber a ciencia cierta de qué se trata el asunto. Yo
No sé quién fue el primero que dijo que la vida útil de un abogado era la de dos procesos ordinarios, pero cuando se lo escuché al profesor de procesal civil en la Javeriana, Rafael H.
Con el interrogante que da título a esta columna me saludó uno de los más agudos analistas de la política nacional. Creo que en nada, se contestó a sí mismo. Analicemos el panorama.
Dicen por ahí, en buena parte de los países de habla hispana, que en Colombia se utiliza bien nuestro idioma; nosotros vivimos orgullosos de esta opinión que nos hace pensar que somos especiales, en cuanto a la manera de usar, pronunciar y utilizar nuestra lengua que es la oficial en toda América Latina hablada, con excepción de Brasil en donde el idioma es el portugués y Haití en donde es el francés. Somos trescientos millones de hispanoparlantes.
A pesar de no contar con un servicio diplomático especializado, Colombia he tenido la fortuna de contar con talentos de primer nivel en el ejercicio de su representación foránea. En diversas épocas y oportunidades no sólo ha sabido responder por sus compromisos, sino ha hecho valer la fortaleza de sus derechos y la justicia de sus aspiraciones.
Muchos de los caminantes del sendero de la Quebrada La Vieja estamos a la expectativa de su reapertura, después de un año de cierre, que fue fundamental para hacer la catarsis que el buen uso de la montaña merece y darle una correcta operación a la más querida de las quebradas en la ciudad.
La semana pasada cuatro jóvenes mujeres de origen colombiano ganaron las nominaciones de sus respectivos distritos en la ciudad de New York para ser candidatas del Partido Demócrata al Congreso de su Estado, lo que les garantiza sus curules pues su Partido en la capital del mundo no tiene rival.
Truenos y centellas anunciaban una enorme tormenta alrededor del Ministro Carrasquilla; llegado el momento cayó un chubasco. Nada de fondo. Un debate ideológico sobre el mercado y la ganancia; y unos temas filosóficos de fondo sobre lo que puede servir de ejemplo Carrasquilla, pero que para nada causan sombra en su capacidad técnica y su claridad moral.