En otras épocas, viajar por la autopista Bogotá - Medellín representaba un altísimo riesgo, especialmente en el tramo del Magdalena Medio.
Quien pasara por allí no sabía en qué momento podía llevarse una sorpresa, pues camuflados detrás de un árbol o en una curva para no ser vistos a la distancia, solían aparecer los paramilitares, como en varias ocasiones sucedió, y un poco más arriba, cerca de Cocorná, en circunstancias similares, la guerrilla practicaba las llamadas "pescas milagrosas".