Sostenía Francisco Carneluti, uno de los grandes tratadistas de Derecho Penal de Italia, que “nada destruía y envilecía más al ser humano que el castigo con cárcel para ciertas infracciones…”. Y muchos países, entre ellos Colombia, afirman que la cárcel, como arma “represiva”, solo debe utilizarse en casos absolutamente indispensables, pues si se cuenta con otras alternativas, lo prudente y lo sensato es acudir a estos medios.
Una revisión de los índices de implementación 5G en el mundo destaca el trabajo que América Latina necesita hacer para mantenerse al ritmo de las otras regiones. De acuerdo con Statista, para 2025, cerca del 14% de las conexiones de redes móviles del mundo serán mediante la tecnología 5G, mientras que la cifra en América Latina sería solo del 7%.
Nuevamente se levanta un alboroto con la posible implementación de la propuesta de campaña del nuevo gobierno para una “paz total”. Intentemos en el imaginario plantear algunas preguntas que se hace la gente y cuales podrían ser las respuestas:
El núcleo fundamental de los derechos individuales está relacionado con las convicciones íntimas, la libertad de expresión, la pluralidad ideológica esencial para la democracia. Un Estado laico y pluralista, no puede imponer valores religiosos, ni valores políticos. Sólo los regímenes totalitarios pretenden anular todas las narrativas existentes, para imponer como única y hegemónica aquella que sirve a sus intereses.
Me afectó mucho la última columna de Monseñor Rafael De Brigard donde anuncia que suspende su pluma en este diario y se retira a sus cuarteles de invierno a reflexionar desde la fe porque, entre otras razones, "son tiempos confusos. Tiempos en que todo ha sido puesto en duda, en cuestionamiento.
Las fuerzas armadas aún están sumidas en el escándalo más grave que ha tenido Colombia en su historia. La justicia desentierra día a día los asesinatos perpetuados contra personas inocentes, presentadas como terroristas, para dar impresión de eficacia y ganar favores. Esas sentencias que ahora salen a luz son concurrentes con la salida del gobierno Duque, electo con el respaldo de Álvaro Uribe, bajo cuyo régimen se perpetraron la mayoría de esos crímenes.
A raíz de mi artículo sobre la masonería, recibí una carta del Gran Prior de la Orden Soberana y Militar del Temple de Jerusalem, organización que opera en Colombia desde 1945, en la que aclaraba que Los Templarios no han sido fundadores de la masonería en el mundo.
Puesto que no llevo corbata no dejo de pensar de qué prenda puedo prescindir para seguir las recomendaciones del presidente de Gobierno español, Pedro Sánchez, para ahorrar energía. Después de darle muchas vueltas, e incluso, poner el aire acondicionado a 27 grados, lo que dicho sea de paso no refresca el ambiente, llego a la conclusión de que nuestros gobernantes viven en una realidad paralela que nada tiene que ver con la realidad.
Un elemento de primordial importancia durante el gobierno del presidente Gustavo Petro será, según lo han manifestado él mismo, la vicepresidenta Francia Márquez y varios de los ministros ya designados, será la protección, promoción, defensa y garantía de los Derechos Humanos. Esa política mostrará una de las grandes diferencias entre el nuevo gobierno y el saliente, que no se distinguió precisamente por la sensibilidad en tal sentido, ni por la gestión al respecto.
El presidente Iván Duque tuvo un periodo difícil, le tocó enfrentar desafíos coyunturales que requerían un liderazgo superior. Retos que lo cogieron con poca experiencia para enfrentarlos, pero que logró sortear de alguna manera. Además, tuvo que lidiar con la oposición más dura que quizás algún gobernante ha enfrentado en la historia de Colombia, sus críticos no tuvieron inconveniente en mentir, en atacarlo como persona y destruir su honra, se metieron con su matrimonio y hasta con sus hijos.