El aniversario veintiséis del magnicidio de Álvaro Gómez Hurtado, coincide con una coyuntura de precampaña a la presidencia que bien podría catalogarse como de “pequeñes y mediocridad”, de, por ejemplo, coaliciones que se hacen y deshacen públicamente.
En contraste, el legado de Álvaro Gómez se reconoce cada vez más. Es por esto que, en honor a su memoria, transcribo apartes de una de las últimas entrevistas televisivas que le concedió a Julio Nieto Bernal.