Pasan los años, pero jamás borraremos de nuestra mente los recuerdos de la senadora Gilma Jiménez, destacada líder que entregó su vida a la lucha por la defensa de los niños y niñas.
Hablar de las oportunidades en medio de la pandemia se ha vuelto recurrente. Y es cierto, hay muchas oportunidades. Este momento de inflexión ha servido para que, como país, pongamos a prueba todo lo que existe y para darnos cuenta de todo lo que nos hace falta.
Se ha dicho que con el eslogan “poca política y mucha administración” Porfirio Díaz quiso sintetizar la orientación de su régimen autoritario en México, 1876 a 1910. Por eso decía: “la política la ejerzo yo y por ello debe haber poca. La administración la realiza mi administración y por ello debe haber mucha. Todo parte de mí y regresa a mí.”
"Me basta con examinar una brizna de hierba, o un puñado de tierra, para ver la mano del Creador.
Isaac Newton
Los profesionales y auxiliares de la medicina son, evidentemente, los héroes visibles de esta guerra declarada. Gustavo Quintero, voz cantante de la Asociación Colombiana de Facultades de Medicina, se ha quejado públicamente por el Decreto 538 de 2020, que señala que el talento humano en salud debe estar disponible -obligatoriamente- para trabajar en tiempos de crisis, aunque parece estar en contravía de la Ley Estatutaria de la Salud (Ley 1751 de 2015) que en su art.
La mano corrupta de una dirigencia integrada por “ratas de alcantarilla”, como las denominó el Presidente Duque, salió en defensa del infame primer lugar mundial que ostentamos dentro de la corrupción. Se había pensado que el tremendo castigo que ha traído a nuestra población el Covid-19, era suficiente penitencia. Pero existe una maraña que no da tregua, que persigue hasta el ultimo centavo de los dineros públicos, de los apoyos de la ciudadanía, del sector privado y de la caridad internacional.
Después de la siembra viene la cosecha, y es así como después de una responsable y alegre siembra espiritual en la Grande Semana tiene que venir copiosa cosecha de gracias para un vivir en alegría y esperanza. Se ha enseñado, claramente, que la Semana Santa no termina con un triunfo pasajero de Jesús sobre la muerte, ni con el llanto de la Madre Dolorosa, sino que continua en la desbordante alegría de la Resurrección e invitación a nueva vida libre de pecado.
Se revelaron las deficiencias del sistema judicial colombiano; quedó en evidencia en esta crisis su absoluta inadaptabilidad a situaciones como lo que estamos atravesando. No existen los instrumentos para que las autoridades judiciales puedan flexibilizar los procedimientos, adaptándolas a la situación de emergencia. Las normas del “debido proceso” no permiten que el juez adapte el procedimiento a los mecanismos que ofrece la tecnología y las plataformas virtuales para no diferir las actuaciones.
El Papa Francisco es un personaje fascinante. Parece un profeta revolucionario, escapado de las páginas del Evangelio.
NO está garantizada la normalización de las cosas el próximo 11 de mayo. No llamarse a engaños. El contraataque de la pandemia aún no hace el mayor daño y la partida es muy complicada.
El avance del virus hay que irlo monitoreando para intentar algún asomo de cuándo será su pico. Medianos de mayo, junio, tal vez.