Por estos días se hace más evidente la irrupción en el panorama intelectual y periodístico, en parte por cuenta de la comunicación improvisada mediante mensajes equivocados, atolondrados o impertinentes por el móvil o el computador, sobre temas que la personas conocen a media o de oídas, lo que con frecuencia pasa con la historia.
Continúo con las predicciones para los años venideros que se empezaron a transcribir en el artículo pasado. Un feliz 2019 para todos los lectores.
20- La Inteligencia artificial: las computadoras se vuelven exponencialmente mejores para entender el mundo. Este año, una computadora venció al mejor jugador de Go-Player del mundo, 10 años antes de lo esperado.
Son muchas las circunstancias actuales que tienen bajo fuerte presión a los cristianos y más exactamente a la fe cristiana. Es una presión que busca que los postulados de esta religión cedan su espacio a otras formas de ver, pensar y realizar la vida. Esta fuerza contraria se respira fácilmente en el ambiente cuando se mira con recelo a quien no comulga con el pensamiento de moda.
EL ganador escribe la historia y la verdad se olvida. Este es el caso de Jorge Leyva Urdaneta: El Grande. Se trata de un conservador que llevó a Colombia de las trochas al modernismo. Pero, como otros inauguraron las obras a Leyva lo borraron de la historia. Por esto, pido la palabra en su nombre.
Cada ser humano nace en una latitud y una longitud específicas, a una hora, unos minutos y unos segundos exclusivos, personalizados. Como nada en la existencia es carente de sentido, esas coordenadas y ese tiempo marcan para toda persona el inicio de esta etapa de su camino, la ruta que habrá de seguir hacia su propia trascendencia.
Un nuevo año comienza con retos para el país, retos que en su mayor parte corresponde liderar al presidente Duque, pero que a todos los colombianos nos comprometen y nos afectan.
Lo más contradictorio del mundo se escribe y se afirma sobre Colombia. Que tiene la más deliciosa variedad de climas; que ha sido cuna de hombres colosales como Santander, Caro, Cuervo, Botero, García Márquez: que nadie nos supera como gente cálida y hospitalaria -ahora mismo damos abrigo a un millón de venezolanos en infortunio- y mil virtudes más.
A un año de terminar su segundo mandato, el Alcalde Enrique Peñalosa le ha sabido cumplir a su ciudad. Sin tregua y sin pausa, ha llevado a feliz término su extenso e intenso programa de obras públicas que siempre ha tenido en mente y que inició hace veinte años cuando ocupó por vez primera la oficina principal del Palacio Liévano.
Era inevitable examinar El País que me Tocó (Memorias) (Debate, Penguin Random House, Bogotá, cuarta reimpresión, 2018), por Enrique Santos Calderón (ESC).
El año que comienza trae buenos augurios. Se vaticinan a partir de esta semana hermosos episodios astronómicos, con eclipses de sol y de luna, lluvias de estrellas y meteoros, fenómenos siderales que por su belleza nos hacen pensar nuevamente que este mundo no vio la luz a punta de golpes bestiales de unos planetas contra otros, sino que tuvo que ser fabricado por un portentoso Arquitecto.