El Gobierno y las fuerzas del No en el plebiscito mantuvieron un diálogo en busca de un pacto nacional de paz.
Este diálogo, que solo pudo darse gracias a los resultados del 2 de octubre, habría sido fructífero si hubiese superado los profundos problemas estructurales de lo negociado en La Habana y solo habría sido útil:
1- Si se hubiese basado en el respeto a la Constitución y los principios vertebrales de la democracia liberal, es decir, si hubiera evitado el adefesio de insertar en la Carta lo firmado en La Habana so pretexto ser un ‘acuerdo especial’.