Muy grave y delicada la denuncia que hace EL NUEVO SIGLO sobre la muerte que le decretó a la Geografía el Instituto Nacional de Pruebas, más conocido por sus siglas como IGFES.  En las pruebas Saber ya no se hacen preguntas sobre esta importante materia, que nos enseña a conocer y a querer a nuestro país, sus territorios y características ambientales. En nuestra época, la Geografía era materia central de la enseñanza.

El “Oso ruso”, como se le conoce dentro del imaginario a Rusia, representa entre otras cosas al mito del siglo XVI, sobre que estos animales abandonaban los bosques durante el invierno para dirigirse a las casas en búsqueda de comida, lo cual generaba que las familias abandonaran sus hogares por el horror y fallecieran luego por el frío. De hecho, el partido político del terrible, despiadado y peligroso Vladimir Putin utiliza un oso como imagen.

El silencio del registrador Vega acrecienta las incógnitas, preocupaciones y señalamientos que han acompañado su gestión en el proceso electoral en curso. Ha preferido aislarse cuando el país entero reclama transparencia en un certamen electoral que se vislumbra apretado y cuyo resultado no puede ni debe ser teñido por sombras, dudas y descalificaciones que lo deslegitimen.

Es oportuno hablar de dos personajes que admiro y respeto -sin proselitismo político- primero, Chucho Lozano, fundador de una universidad en el Chocó. En los años 70, siendo yo director académico del Icfes, viaje a Quibdó, a cerrar una “supuesta universidad, sin pies y cabeza”: tenía una facultad de carnicería y de reparación de buses… Llegué a la rectoría y encontré un profesor parado encima del escritorio del Rector. De ahí me mandó a la cafetería, donde encontré al Rector, quien me recibió con una sonrisa.

Señor Poncio Pilato, el título de juez no representa un privilegio. Entraña una grave responsabilidad. Y a vos os corresponde juzgar hoy a un Hombre que nadie ha acusado. La ley exige varios requisitos para poder procesar a un reo. En este caso singular se han violado todas las normas que rigen en Roma y en Judea. A Cristo se le ha conducido, no por ofendidos, sino por representantes de la autoridad política, ante un Tribunal, el Sanedrín, el cual se ha reunido de noche, lo que rechaza el precepto de obligatorio cumplimiento.

SON muchos los proyectos y temas de Bogotá y la región a los cuales se les define el futuro con las decisiones que los colombianos tomemos en las urnas. Después de las pasadas elecciones parlamentarias, el reto es dejar el liderazgo del país en manos de quien pueda darle el impulso que necesita el desarrollo económico para superar los efectos que deja la pandemia y para concretar los proyectos que nos permitan avanzar como región y como país.

En una democracia, si se respetan las reglas de juego, cualquiera puede triunfar. Reconocer la diferencia y aceptar la posibilidad que ideas de una u otra orientación triunfen, es regla esencial.

Los símbolos patrios son las insignias del país. Son los elementos representativos de la Nación colombiana dentro y fuera del país, son los iconos que nos identifican ante el mundo, y encarnan los valores de nuestra historia, la expresión de nuestras riquezas naturales, de nuestras tradiciones y el heroísmo de quienes dieron la batalla por nuestra vida independiente.

Este mes de abril, más exactamente el día 23, celebramos el día mundial de nuestro idioma, en fecha coincidente con la inhumación de Miguel de Cervantes Saavedra, su máximo exponente y que curiosamente coincide con la del fallecimiento de William Shakespeare, cultor insigne de la lengua inglesa.

La encuesta de la revista Semana, realizada por el Centro Nacional de Consultoría, debe haberse sentido como un bombazo en las huestes de campaña de Gustavo Petro. En segunda vuelta, Petro tendría el 43,1% de la intención de voto, y Fico Gutiérrez le pisaría los talones con un 40,1%. Es decir, un empate técnico por el que nadie daba un peso hace 20 días.