Había una vez en el desierto un cantante vallenato muy famoso, de talento excepcional, el mejor de todos para mi sentir, que respondía al nombre de Diomedes Díaz, cuya muerte en vísperas de Navidad del 2013 “presencié” por los lados de su tierra nutricia, cerca de Palomino, donde le prendían velas desde cuando era un “don nadies”, un simple agricultor que apenas contrataban para sembrar el pánico en zona rural de Carrizal, corregimiento de L
A Colombia nada la conmueve. La polarización a la que hemos llegado conduce a 50 millones de habitantes a pasar por encima de cualquier acontecimiento por importante o trascendente que sea.
Salió al fin la ultima decisión de la Corte de la Haya, donde resuelve la última de la escalada de tres demandas interpuestas por Nicaragua, país que pretendía una plataforma extendida más allá de las doscientas millas náuticas, lo que prácticamente nos invadía el mar Caribe de jurisdicción colombiana, casi que hasta las costas de Cartagena.
China está aspirando aceleradamente a ser (también) un mediador efectivo en conflictos de impacto global.
No solo un Estado con altas capacidades militares y comerciales, sino también altamente influyente en el destino de sociedades selectas, esto es, regional o globalmente importantes.
Las Farc-ep sí están cumpliendo con sus promesas. Bástenos recordar el secuestro y el asesinato de varios: hace poco tiempo dispararon y mataron, junto a un oficial, a algunos soldados. Y aunque suene irónico, las Farc vienen cumpliendo con su cronograma y con su guía política, al tiempo que el Eln viene cumpliendo con el suyo. Miremos con detalle.
Hay un chiste poco patriótico: “Dios optó por darle dos mares, multitud de ríos, la mayor pluviosidad del planeta, diversidad de montañas, bella variedad de pájaros. El río Amazonas, el Magdalena el Orinoco y más. San Pedro le llamó la atención diciéndole que otros países sin mar, áridos, sin lagos ni montañas y sin esa variedad climática, en suma, que no había justicia en la repartición.
Con la incógnita de la posible muerte de Iván Márquez, se aumentaría la lista de estos facinerosos que por décadas han venido destruyendo el país. Todos o casi todos estos jefes guerrilleros, parásitos de la sociedad han venido cayendo victimas de sus mismas atrocidades.
El artículo 2 de la Constitución confía a las autoridades la función de proteger a todas las personas en sus derechos y libertades.
VAMOS a marchar por los soldados y policías quienes por más de sesenta años nos han defendido de grupos criminales de todas las especies.
No sé si es indolencia, indiferencia, desconocimiento o todos juntos, la actitud de los gobiernos y de los colombianos frente al tema del Chocó. Pensamos que la vicepresidenta afro trabajaría por esto, pero estábamos equivocados. Ella ahora disfruta de las mieles del gobierno y su presupuesto.