16 años del asesinato de los 11 diputados del Valle del Cauca

Indepaz

EL 11 de abril de 2002 las Farc tomaron la Asamblea del Valle del Cauca y secuestraron a 12 diputados. Sigifredo López, único sobreviviente, recuerda que en los lamentables hechos tres personas perdieron la vida: un policía que vigilaba el edificio, un camarógrafo que cubría la noticia y el conductor del carro que transportaba al videógrafo.

A pocos días de cumplirse la fecha exacta, han pasado cinco años de aquel 28 de junio de 2007, en el cual el país supo que once de los diputados habían sido asesinados por la guerrilla; diez días antes.

Los integrantes de la guerrilla engañaron a la seguridad de la Asamblea haciéndose pasar por la Fuerza Pública y asegurando tener indicios de una alerta de bomba para después evacuarlos y llevárselos en un camión que los esperaba afuera del edificio, todo esto milimétricamente planeado y entrenado durante varios meses.

Una vez dentro del vehículo fueron notificados del secuestro: “Bueno, señoras y señores nosotros somos las Farc, nos los llevamos del centro de Cali”, recordó Sigifredo López, relatando las palabras de alias ‘J.J’.

La salvación del presidente de la Asamblea

Mientras esto ocurría, Carlos Hernán Rodríguez, presidente de la Asamblea, se salvaba de ser secuestrado y posiblemente asesinado 5 años después. Ese día, horas antes de que iniciara la plenaria, Rodríguez avisó a sus compañeros que se ausentaría puesto que su hijo mayor estaba enfermo y a última hora decidió llevarlo de urgencias al hospital.

A partir de esa fecha que el país nunca olvidará, los familiares de los diputados pedían a gritos y en medio de plantones en la Plaza de Bolívar su libertad. “Con vida se los llevaron, con vida los esperamos”, exigían.

Fabiola Perdomo, esposa del diputado Juan Carlos Narváez, se convirtió en la vocera de los familiares que pedían la pronta liberación o un Acuerdo Humanitario, pero todas esas esperanzas se desvanecieron en el mes de julio de 2007, cuando los 11 diputados fueron acribillados por integrantes de las Farc.

La masacre de los diputados se registró en confusos hechos, puesto que el grupo guerrillero creyó que los secuestrados iban a ser liberados. No obstante, la orden que tenían era asesinarlos si esto ocurría.

Sigifredo López, el único sobreviviente por estar castigado en un calabozo, recordó el trágico momento. “Fueron dos minutos interminables y a la vez doce minutos de oración. Al comienzo dos cruces de balas, luego una ráfaga en respuesta. Más adelante silencio y luego fuego, silencio y fuego. Los últimos tres minutos fueron de un silencio sepulcral”, relató.



“Yo me salvé porque había sido castigado cinco días antes, a raíz de que le exigí a un guerrillero respeto en tono enérgico, tras lo cual fui mandado a un calabozo, lejos de mis compañeros”, agregó explicando que su castigo iría hasta diciembre y estaban apenas en el 14 de junio del 2007.

Cuando comenzó el enfrentamiento, su guardia estaba lavando una vajilla a 140 metros del calabozo, que dejó tirada para salir detrás de los demás guerrilleros. “Tomó la sabia determinación de no gritar y de arroparse con hojas de chonta para que no lo vieran”, sostuvo.

El perdón de los familiares

16 años después, Fabiola Perdomo, la vocera de aquella época, recordó los duros instantes: “son dos momentos que nos generaron mucho dolor, pero sobre todo la muerte, que es cuando se pierde toda esperanza de volverlos a tener en nuestros hogares, y recuerdo ese 28 de junio, cuando las Farc en escueto comunicado informaban el suceso”.

Perdomo expresó, tristemente, con su voz entrecortada, “sí, he perdonado a los victimarios y me he dado cuenta de ello cuando me los he encontrado e interactuado con ellos en diferentes escenarios. Nunca seré amiga de ellos, pero no siento odio ni sed de venganza”.

Por su lado, Carolina Charry, hija del diputado asesinado Carlos Alberto Charry, compartió su experiencia como vocera de los hijos.

“Recuerdo que cuando lo secuestraron era una niña entrando a la adolescencia, ese día estaba en el colegio y nos llamaron para hablar sobre el tema de la bomba. Unas horas después nos dimos cuenta que había sido un secuestro y se habían llevado a los diputados, entre esos a mi papá”, recordó.

Por último, el presidente de la Asamblea, Carlos Hernán Rodríguez, narró el día que asesinaron a sus colegas.

“Recibo una llamada y Fabiola Perdomo me dice 'los mataron. ‒ ¿Cómo así que los mataron? ‒. Mataron a los diputados'. Es un momento en que usted siente que se le viene todo encima", concluyó.