¿Qué está pasando con el aumento de feminicidios?

Universidad del Rosario

RECIENTEMENTE, la Procuraduría General de la Nación alertó que la violencia contra la mujer y los feminicidios en toda Colombia vienen aumentando drásticamente al punto que este año mensualmente se estarían presentado 40 feminicidios y aproximadamente un caso diariamente.

“En 2022 se presentaron 619 casos de feminicidios, significando que en promedio ocurrieron 15 casos al mes y en lo que va corrido del 2023, se han registrado 133 casos, casi 40 mensuales aproximadamente, según cifras del Observatorio Colombiano de Feminicidios”, informó la procuradora general, Margarita Cabello.

En este sentido, EL NUEVO SIGLO habló con integrantes de la Comisión Legal para la Equidad de la Mujer del Congreso sobre las posibles causas de este aumento de casos. ¿Falta legislación o es un problema sociológico que no tiene solución aparente?

Karen Manrique, representante a la Cámara por las Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz (CITREP), señaló que es de gran preocupación el aumento de los feminicidios en Colombia.

“No es solo legislar, sino darle funcionalidad a la institucionalidad, darle un seguimiento oportuno a las rutas de atención a esta población que está siendo objeto de las diferentes situaciones violentas. Es fundamental la activación de rutas, las instituciones deben proveer los diferentes espacios, tanto en los municipios como el departamento y la nación. Debe ser una responsabilidad conjunta y de esa manera podemos velar por los derechos de las mujeres y de los hombres que están siendo violentados a través de esta situación”, explicó.

Asimismo, sostuvo que es fundamental que se activen los protocolos desde el Congreso de la República para hacerle seguimiento y control político a las diferentes entidades que tienen como responsabilidad los derechos de las mujeres.

“Estoy muy presta como integrante de la Comisión para hacer seguimiento. Reitero, no es solo construir leyes, sino más bien es hacer un control oportuno”.

Empoderamiento económico

Flora Perdomo, representante a la Cámara por el Partido Liberal, aseveró que la base para avanzar hacia la solución de este flagelo está en el empoderamiento económico de las mujeres.



“En los últimos años se ha creado legislación en el firme propósito de luchar contra la violencia de género, se han endurecido las penas, pero no se evidencia una mejoría sustancial, debido a que se requieren políticas y normas de empoderamiento que le entreguen a la mujer mecanismos de independencia y de valoración. Aquí hay un problema de salud mental que se debe abordar y atender con todo el rigor porque hombres y mujeres no hemos sido capaces de resolver nuestras diferencias y carencias afectivas por la vía del diálogo, la tolerancia y la comprensión”, explicó.

Bajo esta premisa, indicó que urge una articulación de todas las entidades del Estado para efectivizar las leyes que protegen a las mujeres y se genere la confianza en la denuncia como elemento clave para castigar a quienes les hacen daño. “Es mucho lo que falta por hacer, pero hay avances que necesitamos consolidar”, enfatizó.

Finalmente, Clara López, senadora del Pacto Histórico explicó que, a partir del año 2011, el Congreso ha venido expidiendo leyes que sancionan el feminicidio, la violencia contra las mujeres en sus distintas versiones, violencia sexual, y en la legislatura que recién termina, contra la violencia política.

“Espero en la próxima legislatura que se apruebe un proyecto de mi autoría contra la publicación en redes sin consentimiento de imágenes íntimas. Esta última también contempla la reparación de las víctimas y ordena el diseño de una política pública de prevención y visibilización de la problemática de violencia contra las mujeres en las redes sociales. Pero la ley no es todo. Pienso que el tema de la implementación es clave”, indicó.

En este sentido, señaló que para ello se requiere promoción, concientización de la sociedad, y la actuación de las autoridades en todos los niveles: alcaldías, gobernaciones, Gobierno Nacional, Fiscalía, Defensoría del Pueblo, personerías y Fuerza Pública.

“Debemos buscar una mejor articulación entre toda la institucionalidad y las organizaciones de mujeres para integrar planes de prevención efectiva y trabajar el tema cultural. El machismo está muy enraizado en nuestros usos y costumbres, lo que hace necesario estimular comportamientos de respeto frente al género y su diversidad. El avance y empoderamiento de la mujer es tal vez la revolución más profunda de nuestro tiempo. Una revolución no violenta que avanza. Tiene muchos avances, pero falta un enorme recorrido para conquistar la plena igualdad entre hombres y mujeres que derrote de raíz el feminicidio”, concluyó.