Enfrentado

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Una de las ministras confirmadas para el próximo gobierno es Cecilia López Montaño, quien asumirá la cartera de Agricultura desde el 7 de agosto y ya ha enfrentado comentarios en contra de lo que sería una posible política de expropiación, que algunos opositores reiteran se vendría en el mandato de Gustavo Petro.

Sin embargo, la próxima jefe de la cartera de Agricultura ha reiterado que no se le expropiarán las tierras a nadie, pero sí indicó que se garantizará la reactivación del campo, convirtiéndolo en una potencia en producción de alimentos en el país.

De igual modo, ha señalado que los territorios que no sean utilizados serán comprados a sus dueños, pero no habrá expropiación. “El tema central del sector de la Agricultura en el gobierno de Gustavo Petro se enfocará en la transformación productiva y la reforma agraria; no se trata de expropiar nada, simplemente de que esas tierras que están subutilizadas las puedan disfrutar los millones de campesinos que han estado sin tierra”.

Por eso, la senadora del Centro Democrático María Fernanda Cabal cuestionó en sus redes sociales si esta medida aplicaría a las tierras de las comunidades indígenas, quienes tienen más de 33 millones de hectáreas.

Cabal escribió: “En Colombia, las comunidades indígenas tienen 33.442.597 hectáreas, ¿será que la ministra Cecilia les aplicará catastro multipropósito y les quitará las tierras improductivas? Ya que quieren igualdad, empecemos por ahí”.

Ante este cuestionamiento la nueva ministra contestó, también a través de Twitter, y le reprochó que una senadora no conociera las regulaciones sobre las comunidades indígenas.

“Senadora Cabal: yo puedo entender que algunos ciudadanos no conozcan la ley, la Constitución colombiana y tratados internacionales firmados, pero debo sorprenderme cuando una senadora tan experimentada y leída como usted abiertamente reconoce desconocer nuestras regulaciones”, trino López.



López dijo en una entrevista a EL NUEVO SIGLO que uno de sus retos fundamentales será que el sector agropecuario entre a ser una absoluta prioridad del nuevo gobierno. “Dentro de esa absoluta prioridad está la reforma agraria. Una reforma agraria con unas características muy particulares porque tiene que ser con el objetivo de convertir al sector agropecuario en una potencia en producción de alimentos. Y, además, debe hacerlo de una manera sostenible”.

“Son 30 años en donde la política agropecuaria no ha tenido la importancia ni los objetivos que hoy se pretenden. Entonces, no va a ser fácil, pero se debe iniciar un proceso, que empieza por el tema de que mucho de ese campesinado tiene microfundio. Ni siquiera tiene el mínimo de dos hectáreas para poder producir. O sea, que la distribución de tierras productivas, no de baldíos, será el eje principal para arrancar ese proceso que tiene que terminar con tener una buena oferta alimentaria”, sostuvo.