11 migrantes muertos y 44 desaparecidos en naufragio frente a Túnez

AFP

Once migrantes originarios de África subsahariana murieron y otros 44 están desaparecidos tras un naufragio en el Mediterráneo frente al puerto de Sfax, ciudad tunecina epicentro de la emigración clandestina, anunciaron el lunes fuentes judiciales.

Paralelamente, en otra de las rutas migratorias clandestinas hacia Europa, en el Atlántico, una fuente militar marroquí anunció el hallazgo de cinco cuerpos de migrantes senegaleses tras el naufragio de su embarcación frente al Sáhara occidental. Otros 189 migrantes pudieron ser rescatados.

En Túnez "siete nuevos cuerpos fueron sacados del agua el domingo por la noche", que se añaden a los cuatro hallados antes, indicó a AFP Faouzi Masmoudi, portavoz del tribunal de Sfax (centro-este).

El vocero añadió que las búsquedas continúan ya que sólo dos migrantes fueron rescatados del barco en el que según los supervivientes viajaban 57 personas.

La precaria embarcación partió de una playa al norte de Sfax y naufragó cerca de las islas Querquenes.

Sfax está a unos 130 km de la isla de Lampedusa, en Italia, y desde principios de 2023 es el principal punto de partida de miles de migrantes que intentan cruzar el Mediterráneo hacia Europa.

Del 1 de enero al 20 de julio, 901 cuerpos de migrantes, en su mayoría procedentes de África subsahariana, fueron encontrados frente a las costas de Túnez, según un balance oficial tunecino.



La ruta más peligrosa 

Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), el mediterráneo central, entre África del norte e Italia, es la ruta migratoria más peligrosa del mundo, con más de 20.000 muertos desde 2014.

La salida de migrantes de África subsahariana se aceleró tras un discurso, el 21 de febrero, del presidente tunecino Kais Saied, en el que denunció la llegada de "hordas de clandestinos" venidos, según él, para "cambiar el equilibrio demográfico" del país.

Tras la muerte, el 3 de julio, de un tunecino en una pelea entre migrantes y habitantes locales, al menos 2.000 africanos fueron abandonados por la policía tunecina en las zonas desérticas cerca de la frontera con Libia y Argelia, según nuevos datos comunicados por una fuente humanitaria.

Al menos 25 murieron en el desierto libio-tunecino desde principios de julio, según la última evaluación de fuentes humanitarias.

En el naufragio anunciado el lunes en Marruecos, los cinco cuerpos y 11 migrantes "en estado crítico" fueron trasladados a un hospital en Marruecos.

La embarcación había zarpado clandestinamente "de un país ubicado al sur del Reino" y se dirigía a las islas Canarias.

Fue interceptada frente a Guerguart en una "situación difícil", según la fuente militar.

Situado en el extremo noroccidental de África, Marruecos es un país de tránsito para muchos migrantes que intentan llegar a Europa desde sus costas atlánticas o mediterráneas.

La ruta migratoria de las Canarias, puerta de entrada a Europa por el océano Atlántico, ha experimentado un notable aumento de actividad en las últimas semanas desde las costas del noroeste de África.

Al menos 13 migrantes senegaleses murieron a mediados de julio al naufragar su piragua frente a la costa marroquí.