Amín Martínez en concierto este jueves en Bogotá

Cortesía Prensa

EN LA ZONA Rosa (Mezcal Cantina), los amantes del vallenato clásico podrán disfrutar con los éxitos que hicieron famoso a los “Chiches vallenatos” de la mano de Amín Martínez, la voz original del grupo.

Amín "El Chiche" es uno de los máximos exponentes del vallenato. El artista colombiano en la década de los 80 creó el grupo "Los Chiches vallenatos" que sería referencia en el género latino durante más de 10 años, donde recibió varios premios, entre ellos el Vallenato de Oro en 1999.

En 2001 empezó su carrera en solitario, interpretando las canciones que en su inicio le dieron a conocer y creando nuevos temas como: Ceniza fría, Voy a olvidarte, Tierra Mala, Muchacha encantadora, entre muchos otros.

El artista también estará presentando el lanzamiento de un nuevo tema musical, tomado del vallenato clásico llamado "Causa perdida". Luego el artista inicia una gira internacional en la que recorrerá varios países de América Latina, Paraguay, Argentina y, posteriormente, USA y Europa.

Una noche para cantar a grito herido los éxitos de los 80. La cita para este gran musical será hoy, a las 7:00 p.m., en Mezcal Cantina, un show musical imperdible.

Desde 1987 Amín Martínez ha conquistado multitudes con éxitos como Ceniza fría, Tierra mala, Muchacha Encantadora, Fábula de amor, Mi primer amor, y muchos éxitos más.

El grupo fue fundado en 1987 bajo la asesoría permanente del exitoso director artístico Pedro Muriel. En 1988 grabaron su primer álbum “Enamorado del amor”, Amín sigue vigente en el corazón de todo el mundo.

El cantante proveniente de una familia humilde, de campo, salió de su casa a estudiar a Santa Marta para cumplir el sueño de su papá de convertirse en médico veterinario, pero su pasión por la música lo llevó a tomar rumbos distintos. El oriundo de Mandinguilla, una vereda ubicada en Chimichagua, Cesar, se involucró en el mundo artístico cuando, viviendo pensionado en la ciudad de Santa Marta, escuchó el son de la caja, la guacharaca y el acordeón en una parranda.



“Una noche, casi a las 9:00 de la noche, escuché una caja, pero se escuchaba cerquita, y le dije a la señora donde vivía que yo quería ir donde sonaba esa caja, eso le rogué para que me dejara ir, y me fui. Y cuando llego allá, qué sorpresa, escucho a Adanies Díaz, Ismael Rudas, y como pude entré y me puse a hacer los coros y todo el mundo quedó asombrado”, contó el artista en una entrevista que dio al comunicador Fito Osorio.

Desde ese momento la vida de Martínez cambió. El también cantante Miguel Patiño lo invitó a la ciudad de Barranquilla para realizar unos “toques”, estando allá se enteró que la agrupación vallenata, Los Embajadores, estaban en busca de un corista y decidió “probar suerte” en la ciudad de Bucaramanga.

“Me fui para Bucaramanga y encontré a los famosos Embajadores, allí empecé con ellos y en una presentación que tuvimos en Ocaña, Norte de Santander, me dieron la oportunidad de cantar, allí me escuchó German Carreño y Víctor Pascuales, me dijeron que me consiguiera un acordeonero y que le mandara una muestra a Discos Fuentes, 20 días después grabamos con Discos Fuentes nuestro primer CD titulado «Enamorado de amor»”, relató el cantante.

Desde allí desplegó su vida musical, “Ceniza fría” sonó en Santander y parte del Cesar. Luego vino su segundo álbum llamado “Uno A”, compuesto de 12 canciones, de las cuales 10 “se pegaron”, entre ellas: “No lucharé por lo que ya perdí”, “A tu ventana”, “Te veré llorar”, “Murió el amor”, entre otros.