En el mundo somos uno de los diez países preferibles para vivir tras jubilarse, según el índice global del 2018. Esto por supuesto contrasta con la visión pesimista de algunos criollos que aseguran que la administración del infierno es muy similar a la colombiana, solo que la del infierno es en serio.
El informe considera que el país tiene calor humano, una cultura sofisticada y es “asequible”, vale decir que el costo de vida es favorable al pensionado en dólares o euros. Destacan el clima privilegiado y el poseer una gran diversidad en flora y fauna, un verdadero paraíso para los atisbadores de pájaros exóticos o de los aficionados a la jardinería.
En cuanto a sistemas de calidad de salud, lo que preocupa más a los jubilados, ocupa el puesto 22 entre 191 países por delante de Canadá y Estados Unidos. Otros anotan que es el único país sudamericano con costas en el Pacífico y el Atlántico, participa de la cuenca del rio Amazonas y goza de los más importantes paramos del planeta. Agregan que se trata con amabilidad y cortesía a los extranjeros.
El creciente número de extranjeros que optan por quedarse suelen justificar su decisión en la calidad de vida y en la benignidad del clima. Les parece una bendición esa suerte de eterno otoño de Bogotá durante todo el año o la perpetua primavera de Medellín, que contrasta con los súbitos y violentos giros de las estaciones norteñas, con fríos bajo cero durante tres o cuatro meses al año. O temperaturas hirvientes otros tres meses.
Por si fuera poco, con la firma de la paz con las Farc, los turistas que deseaban jugar a ser Rambos por una semana adentrándose a las zonas del conflicto tipo Ingrid Betancur, ya no tendrán que prolongar su estadía por siete años en cadenas, pagando su insensatez.
Y justo con este informe que destacó la Deutsche Welle, se desmintió una vez más la tesis conspirativa sobre la huida de la cúpula nazi con Hitler a la cabeza, hacia Suramérica. Incluso hubo rumores de que había estado por Boyacá buscando “mejorar la raza.” Esa tesis aseguraba que se había fugado de Alemania en el desaparecido submarino U-3523 del que se desconocía su paradero. Recién el ministerio de defensa de Dinamarca al fin halló los restos del submarino hundido a 123 metros en sus aguas territoriales.
Colombia no albergó con sus encantos a Hitler, quien se suicidó aunque algunos lo duden, hace 73 años que se cumplirán este 30 de abril. Y dos días antes había muerto Mussolini a quien sus captores prometieron “no le tocarían un pelo” cosa que cumplieron pues él era ostensiblemente calvo.
La cumbre de la Américas simboliza la entrada en edad de Suramérica respecto a USA, ellos no se interesan por el sur y debemos buscar otros socios. Perú lo está haciendo con la China, y Colombia que es lo único que nos queda, bien puede buscar mejores aires.
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